Zagori es la Grecia desconocida, la verde y montañosa. En el noroeste del país, casi lindando con Albania.
El puente de Kokoris fue nuestra primera parada.
Kipi, el primer pueblo que nos encontramos. Censo de 86 habitantes. Mucho calor en verano y nieve en invierno ( Sí, en Grecia nieva).
Monodendri, pequeño pero encantador. Famoso por ser la entrada a la Garganta de Vikos.
El mejor sitio para disfrutarla sin arriesgarte a sus 600 metros de acantilado es el monasterio de Agia Paraskevi.
La garganta de Vikos tiene el honor de ser la más profunda del mundo.
Nuestra siguiente parada fue Papingo. Un pueblo que bien podría estar en los Alpes por las montañas que lo rodean. Sin embargo, al igual que los otros pueblos de Zagori, está hecho de piedra.
Los macizos que rodean el pueblo.
Piedra en muros y calles.
Última parada del día en Metsovo. Estación de invierno repleta de hoteles.
Cena en terraza y descanso. Final de un recorrido por una región de montaña apenas conocida fuera de Grecia.